Como ustedes bien saben, los muchachos de Astrid han sido una especie de sombra para Los Pibes Corvinas durante los años 2007 y 2008, porque ellos obtuvieron un bi campeonato y nosotros (Repitiendo la historia de siempre) alcanzamos el bi subcampeonato.
Pero eso fue historia, porque en el último enfrentamiento entre ambos equipos Los Pibes Corvinas nos impusimos con un categórico 4 a 0 que no dejó margen de dudas. Ellos estuvieron borrados de la cancha (Casi como si no se hubiesen presentado) y nosotros ganamos sin transpirar (Casi como si no hubiésemos entrado en calor).
Por eso este partido era un clásico y lo vivimos como tal. Teníamos que revertir la imagen del partido de la primera fecha, partido en el cual se nos acusó de ganar casi como "DE CASUALIDAD" por errores ajenos.
Para agregar un poco de emociones a este partido tan especial (Ustedes saben lo que me genera un rival con la camiseta del Chelsea) caímos en cuenta que, faltando 20 horas para que la pelota empiece a rodar, sólo éramos 9 jugadores. Las lesiones, la cosecha, los bautismos, los casamientos todo complotaba en contra nuestra. Pero el futbol pudo más y presentamos equipo (¡Y qué equipo!)
Para este partido y con la ausencia de Nacho (El goleador del torneo) Los Pibes Corvina depositaron el peso ofensivo en Cristian “Caldera” Diaz, apodo que no se ganó a base de potencia física y rivales vencidos sino más bien por los años que acarrea con él. Y Diaz no decepcionó.
Tampoco decepcionó el equipo que hasta se dio el lujo de dormir los primeros 15 minutos (Y eso que Astrid nos sacudió de lo lindo para despertarnos) antes de empezar a jugar en serio.
Pero los Pibes reaccionamos y el partido que arrancó con un 0-1 se transformó en un 3-2 al final del primer tiempo. Los goles de Diaz, Sanguinetti y Barrionuevo lograron compensar los errores horrores defensivos del primer tiempo.
En el descanso de la primera mitad no charlamos nada, por lo que vale aclarar que si jugamos mejor en el segundo tiempo fue producto de la suerte o la reflexión personal. Sería falso decir que los DT motivaron al equipo, ya que uno se estaba vendando y el otro (Es decir yo) se estaba recuperando del baile del 1er tiempo.
Pero la suerte favorece a los que están preparados para tomarla, y gracias al entrenamiento de la semana se encontró aire para mantener la intensidad en ataque y con unas genialidades de Silva (Tiro libre impecable al ángulo del arquero) y Diaz para capturar un rebote nos pusimos 5 a 2 de manera impensada. Pero eso no fue todo, porque el delantero amigodeMarcosquenomeacuerdoelapellidoperosellamabaMartín se sacó a un rival que le proponía intercambiar de camisetas antes del final del partido, entró al área por el sector medio de la cancha y despachó al arquero con un zurdazo cruzado inatajable.
Los Pibes nos abrazamos incrédulos del resultado (6 a 2 a Astrid) y se ve que el abrazo duró más de lo debido porque ellos nos clavaron 2 pepas por estar distraídos y con el “Partido Liquidado” de Walter Nelson resonando en las cabezas.
Resultado final 6 a 4 (Que podría haber sido cualquier otro, en serio, cualquiera) pero con sabor a goleada para los Pibes Corvina. Creo que debemos mejorar la atención hasta el final del partido y desde el arranque del mismo (Dos detalles, total que son 25 minutos si el partido dura 80, ¿no?). Pero si se busca salir subcampeón tenemos que ganarles a todos menos a uno y ese uno no puede ser el rival de la 2º fecha.
Arriba Corvinas, ánimos para la 3º fecha.
Pero eso fue historia, porque en el último enfrentamiento entre ambos equipos Los Pibes Corvinas nos impusimos con un categórico 4 a 0 que no dejó margen de dudas. Ellos estuvieron borrados de la cancha (Casi como si no se hubiesen presentado) y nosotros ganamos sin transpirar (Casi como si no hubiésemos entrado en calor).
Por eso este partido era un clásico y lo vivimos como tal. Teníamos que revertir la imagen del partido de la primera fecha, partido en el cual se nos acusó de ganar casi como "DE CASUALIDAD" por errores ajenos.
Para agregar un poco de emociones a este partido tan especial (Ustedes saben lo que me genera un rival con la camiseta del Chelsea) caímos en cuenta que, faltando 20 horas para que la pelota empiece a rodar, sólo éramos 9 jugadores. Las lesiones, la cosecha, los bautismos, los casamientos todo complotaba en contra nuestra. Pero el futbol pudo más y presentamos equipo (¡Y qué equipo!)
Para este partido y con la ausencia de Nacho (El goleador del torneo) Los Pibes Corvina depositaron el peso ofensivo en Cristian “Caldera” Diaz, apodo que no se ganó a base de potencia física y rivales vencidos sino más bien por los años que acarrea con él. Y Diaz no decepcionó.
Tampoco decepcionó el equipo que hasta se dio el lujo de dormir los primeros 15 minutos (Y eso que Astrid nos sacudió de lo lindo para despertarnos) antes de empezar a jugar en serio.
Pero los Pibes reaccionamos y el partido que arrancó con un 0-1 se transformó en un 3-2 al final del primer tiempo. Los goles de Diaz, Sanguinetti y Barrionuevo lograron compensar los errores horrores defensivos del primer tiempo.
En el descanso de la primera mitad no charlamos nada, por lo que vale aclarar que si jugamos mejor en el segundo tiempo fue producto de la suerte o la reflexión personal. Sería falso decir que los DT motivaron al equipo, ya que uno se estaba vendando y el otro (Es decir yo) se estaba recuperando del baile del 1er tiempo.
Pero la suerte favorece a los que están preparados para tomarla, y gracias al entrenamiento de la semana se encontró aire para mantener la intensidad en ataque y con unas genialidades de Silva (Tiro libre impecable al ángulo del arquero) y Diaz para capturar un rebote nos pusimos 5 a 2 de manera impensada. Pero eso no fue todo, porque el delantero amigodeMarcosquenomeacuerdoelapellidoperosellamabaMartín se sacó a un rival que le proponía intercambiar de camisetas antes del final del partido, entró al área por el sector medio de la cancha y despachó al arquero con un zurdazo cruzado inatajable.
Los Pibes nos abrazamos incrédulos del resultado (6 a 2 a Astrid) y se ve que el abrazo duró más de lo debido porque ellos nos clavaron 2 pepas por estar distraídos y con el “Partido Liquidado” de Walter Nelson resonando en las cabezas.
Resultado final 6 a 4 (Que podría haber sido cualquier otro, en serio, cualquiera) pero con sabor a goleada para los Pibes Corvina. Creo que debemos mejorar la atención hasta el final del partido y desde el arranque del mismo (Dos detalles, total que son 25 minutos si el partido dura 80, ¿no?). Pero si se busca salir subcampeón tenemos que ganarles a todos menos a uno y ese uno no puede ser el rival de la 2º fecha.
Arriba Corvinas, ánimos para la 3º fecha.
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